En el cierre de este programa de Cátedra Avícola y Agropecuaria, la cámara se metió en el corazón de Don Fresco, para dialogar con María Rosa Gotte y sus hijos Darío y Pedro, quienes día a día impulsan el crecimiento de esta empresa familiar que ya es un referente en el sector alimenticio argentino.
Con emoción, María Rosa repasó los comienzos de la empresa y el esfuerzo compartido detrás de cada logro:
“Empezamos con lo que teníamos, con ganas y con mucho trabajo. Ver lo que hemos construido juntos me llena de orgullo. Esta es una familia que nunca bajó los brazos.”
Luego, Darío y Pedro Gotte destacaron el papel de la familia como base de la empresa y la importancia de mantener la esencia más allá del crecimiento.
“Don Fresco es familia, compromiso y trabajo bien hecho. No somos una marca que busca solo vender: queremos dejar una huella, ser parte de la mesa de los argentinos con productos frescos y confiables”, señaló Darío.
Pedro agregó: “Lo más valioso es seguir trabajando juntos, con respeto, con ideas nuevas y con la misma pasión de siempre. Cada paso que damos lo hacemos pensando en el futuro, pero sin olvidar de dónde venimos.”
La historia de Don Fresco refleja la fuerza del trabajo familiar argentino, el valor de la perseverancia y la capacidad de innovar sin perder las raíces. Una empresa que crece mirando hacia adelante, pero con el corazón en su historia.
