Con las secuelas de un año complejo, tanto en lo climático como en lo sanitario, el verano trae consigo un nuevo escenario para la avicultura argentina. Yari Lucerna advirtió sobre la importancia de prepararse ante el estrés calórico, que puede afectar significativamente la producción de huevos para consumo. “Todo lo que le produzca estrés al animal va a traer problemas si lo asociamos con lo sanitario. El calor es un estrés, el frío intenso es un estrés”, explicó Lucerna, desde su localidad santafesina de Esperanza.


En cuanto al panorama sanitario, Lucerna fue contundente sobre la persistencia de la influenza aviar, que considera prácticamente endémica: “Este año no nos dejó tranquilos nunca. Ya es endémica y está dentro de nuestro país. Hay que hacer bioseguridad y en eso se está trabajando”. En ese sentido, advirtió que “no hay mejor vacuna que la bioseguridad por el momento”, una frase que resume la importancia crucial de las prácticas preventivas, especialmente en contextos donde la vacunación aún tiene limitaciones.
Respecto al mercado, el veterinario explicó que estamos ante una etapa de correcciones en los precios y en la cantidad de huevo disponible. “Está saliendo mucha gallina a faena”, indicó, debido a que durante gran parte del año se sostuvo a las gallinas con niveles aceptables de productividad. Esto generó una sobreoferta de huevo grande (huevo número uno), tendencia que comienza a revertirse. No obstante, denunció presiones desde el canal de distribución: “Se presiona, está raro, y eso es por los distribuidores. En el supermercado, en la despensa, no bajó el huevo”.
En paralelo, el profesional instó a no bajar la guardia en materia de vacunación. Alertó sobre el regreso de enfermedades como la laringotraqueitis, que presenta más casos reales que los denunciados oficialmente: “La mayoría de los casos fueron por descuidos en el plan vacunal. No hay que caer en el ‘como no hay casos, no vacuno más’, porque ahí es cuando reaparecen los problemas”.
Finalmente, Lucerna compartió una perspectiva alentadora: Argentina podría cerrar 2025 como el país con mayor consumo per cápita de huevos en el mundo, superando el liderazgo histórico de México. “El consumidor va y compra huevo porque sabe que es bueno, que es sano, que es económico. El trabajo que hace la Cámara, que se puso al hombro Javier Prida, es impresionante”, destacó. Esta tendencia refleja no solo un cambio cultural en la dieta de los argentinos, sino también una oportunidad estratégica para consolidar al huevo como uno de los productos estrella de la agroindustria nacional.

