La avicultura argentina atraviesa un momento sanitario complejo. Así lo expresó el Dr. Lucas Sara al referirse a las enfermedades que se encuentran actualmente activas en las principales zonas productoras del país. “Se están dando, en diferentes zonas, diferentes problemáticas y las empresas están tratando de pelear contra eso, y no es fácil”, afirmó el prestigioso médico veterinario.
Las principales problemáticas sanitarias hoy se concentran en la Región Centro del país. En Entre Ríos, particularmente en la costa del río Paraná, la laringotraqueítis infecciosa aviar ha tomado fuerza y preocupa al sector, extendiéndose también hacia la costa del río Uruguay. Además, en esa zona, endémica en hepatitis aviar, los casos son menos intensos por cuestiones estacionales, aunque la amenaza persiste. En tanto, en la provincia de Buenos Aires la hepatitis continúa presente, mientras la influenza aviar sigue siendo una constante preocupación por sus antecedentes de alta patogenicidad.
Ante esta coyuntura, la industria veterinaria ha hecho foco en dos estrategias: prevención y comunicación. En relación a la hepatitis, Sara destacó los avances logrados en los últimos años mediante la vacunación de reproductoras. “Yo creo que prácticamente toda la población de reproductoras está vacunada”, afirmó, y señaló la importancia de la inmunidad pasiva que estas madres transfieren a los pollitos. “Eso puede hacer una diferencia para fin de año y principio de 2026”, agregó. Cabe recordar que la introducción de esta vacuna fue autorizada tras intensos debates técnicos con las autoridades, en los que participó el propio profesional.
En el caso de la laringotraqueítis, Sara advirtió sobre la complejidad del avance del virus en Crespo y su zona de influencia. “Básicamente el virus se ha ido diseminando y tomando virulencia”, señaló, comparando la situación con lo ocurrido años atrás en la provincia de Buenos Aires. Para enfrentar esta patología, será clave la implementación de planes de vacunación y el trabajo conjunto entre actores del sector. En ese marco se realizará una jornada técnica el 25 de noviembre en Crespo, organizada por Cátedra Avícola, CEVA y Cabaña Avícola Feller, junto con autoridades municipales. El objetivo: compartir conocimientos, estrategias y fortalecer los lazos entre veterinarios y productores.
“El control del laringo es un proceso lento, pero si hacemos lo que tenemos que hacer desde el punto de vista de la protección, se mejora la condición general”, aseguró Sara. La clave, dijo, es “la comunicación entre veterinarios y productores” para alcanzar decisiones integrales y así evitar la propagación de estos brotes. En un contexto donde la prevención y la rápida respuesta son vitales, el intercambio de información entre actores del sistema cobra una relevancia fundamental.

