En la continuación de nuestra entrevista con el M.V. Eduardo Godano, exploramos la planta clasificadora de huevos y las estrictas prácticas de calidad que mantienen a esta empresa como líder en la industria avícola. Godano nos muestra cómo la automatización y el control sanitario garantizan que cada huevo cumpla con los más altos estándares antes de llegar al consumidor.
Automatización en la clasificación de huevos
La planta clasificadora de Granja Siete Hermanos está diseñada para procesar los huevos de manera automática, sin intervención manual. “Todo el huevo que proviene de los galpones de postura, sin que un humano lo toque, llega hasta acá, se clasifica y se estucha sin el contacto de un operario”, explica Godano. Este sistema garantiza la higiene y eficiencia en todo el proceso.
Diversidad de producción
En la planta clasificadora, se maneja tanto huevo blanco como de color, provenientes de gallinas que producen dentro de galpones tradicionales y gallinas libres de jaula. Para mantener la calidad y evitar la mezcla de huevos, se realiza una limpieza intermedia de la máquina clasificadora. “La limpieza es fundamental principalmente por todo lo microbiológico”, destaca Godano, subrayando la importancia de la higiene en cada etapa del proceso.
Clasificación y empaque
La cinta automática transporta los huevos desde los galpones hasta la máquina clasificadora, que pesa cada huevo y lo clasifica según su tamaño. La clasificadora MOVA de 80 cajones por hora permite empaquetar los huevos en estuches de celulosa para el consumidor final o en maples de cartón o plástico para la industria. “El huevo que se destina al retail lo manejamos con nuestros maples de cartón”, aclara Godano.
Estándares de calidad consistentes
Granja Siete Hermanos mantiene un estándar único de calidad para todos sus huevos. Antes de ingresar a la máquina clasificadora, se realiza una preselección para retirar los huevos sucios o dañados. “En Granja Siete Hermanos tenemos un solo tipo de huevo, una sola calidad de huevo”, afirma Godano. Este compromiso con la calidad asegura que cada huevo que llega al consumidor sea fresco y de alta calidad.
Procesos diarios y frescura
La planta clasificadora opera los siete días de la semana, garantizando que todos los huevos en el depósito provengan de la postura del día. “Nosotros clasificamos, inclusive, los días domingos”, comenta Godano. Este enfoque asegura que el consumidor siempre reciba un producto fresco.
Destino final del huevo
Los huevos clasificados se destinan tanto a la industria como al mercado minorista. Empresas como Tecnovo reciben huevos de alta calidad para su uso en productos industriales, mientras que los consumidores pueden encontrar los huevos de Granja Siete Hermanos en estuches en los supermercados. “Se va a su destino final, ya sea la industria o los centros de venta que tiene la empresa”, dice Godano.
Impacto de la influenza aviar
La influenza aviar tuvo un impacto significativo en la industria avícola global y local. Godano describe cómo la crisis sanitaria obligó a las granjas a implementar medidas estrictas de bioseguridad, comparando la situación con la pandemia de COVID-19. “Las granjas pasaron a estar en un permanente estado de alerta”, explica. Estas medidas incluyen arcos de desinfección, ingreso restringido de personas y el uso de tejidos antipájaro.
Mejoras contínuas
A pesar de la tranquilidad actual, Granja Siete Hermanos mantiene un estado de alerta permanente. Las mejoras implementadas durante la crisis de la influenza aviar han llevado a un estatus sanitario más robusto. “No hay mal que por bien no venga; la influenza aviar nos acostumbró a nosotros los veterinarios, y también a los empresarios, a invertir para mejorar el estatus sanitario”, concluye Godano.
Conclusión
La dedicación de Granja Siete Hermanos a la calidad y la innovación se refleja en cada huevo que producen. Desde la producción automatizada y el riguroso control sanitario hasta la clasificación precisa y el empaque cuidadoso, la empresa garantiza que cada huevo cumpla con los más altos estándares antes de llegar al consumidor. Con un enfoque en la sostenibilidad y la mejora continua, Granja Siete Hermanos sigue liderando la industria avícola en Argentina.
